Bernard de Tremelay.
Bernard de Tremelay (?- † 16 de agosto de 1153) es el cuarto Gran Maestre de la Orden del Temple (junio de 1151 - 16 de agosto de 1153).
Borgoñón de nacimiento y antiguo comendador de Dole, en el Franco Condado, es posible que sucediera a un Maestre llamado Hugues, cuya existencia parecer ser bastante dudosa, ya que sólo De Cange lo cita.
Según los cronistas de las cruzadas, Bernard de Tremblay reconstruyó la ciudad de Gaza.
Murió luchando en la batalla de Ascalón, junto con todos los Templarios que estaban bajo sus órdenes, en el transcurso del penúltimo asalto, el día 14 de agosto de 1153, poco antes la toma de la ciudad. El registro de defunciones de la parroquia de Reims señala su muerte el 17 de las calendas de septiembre, es decir el 16 de agosto.
Esto se corresponde con las fechas de las crónicas, ya que Ascalon cayó en manos de Balduino III, el 19 de agosto de ese mismo año.
Bernard de Tremelay o Dramelay, o Dramelet nació al castillo de este nombre en los alrededores de Saint-Claude, en la región del Jura. Fue elegido en 1151 para suceder a Evrard des Barrès, después de que un tal Hugues hubiera asumido un periodo de interregno hasta que el anterior Gran Maestre confirmó su dimisión.
Balduino III ofrece a la Orden la ciudadela en ruinas de Gaza. " Estos monjes - guerreros, dice Guillermo de Tiro, que sin embargo les envidia - gente llena de coraje, terminaron de fortificar esta ciudad elevando torreones y nuevas trincheras, que hicieron de ella una plaza de armas inexpugnable, desde donde reprimieron las correrías de la guarnición de Ascalon y forzaron por fin a los sarracenos a encerrarse en sus murallas. "
En 1153, los Templarios participan en el asedio de Ascalón, que Balduino III quiere arrebatar a los egipcios. Los Templarios construyen una torre de asalto que los asediados consiguen incendiar. Pero el viento, que sopla las llamas sobre las murallas, abre una brecha a través de la cual se precipitan los Templarios. Bernard de Tramelay, a la cabeza de sus hombres, dirige el asalto sin advertir de ello a Baudouin III.
" Según Guillermo de Tiro, lo hizo porque no quería compartir con él el botín ". Según otros cronistas, simplemente es porque, en la vorágine de la acción, no llegó a pensar en eso.
Esta omisión la paga con su vida y la de su escolta. Porque los asediados, al comprobar su pequeño número, una cuarentena, arremeten contra ellos y los masacran. Sus cuerpos son expuestos sobre las murallas y sus cabezas cortadas son enviadas al sultán, en Egipto. Luego los sarracenos llegan hasta el campamento de Balduino III.
El combate es sangriento, y durante bastante tiempo su resultado es incierto. Los cruzados derrotan a los asediados gracias a los Templarios que habían permanecido junto al rey de Jerusalén.
El 19 de agosto de 1153, el estandarte templario ondea sobre las murallas de Ascalón. El coraje extraordinario con el que se han conducido los Templarios en el momento de la batalla es alabado en todas las cortes de Occidente y el papa Anastasio IV les concede nuevos privilegios. André de Montbard le sucede a la cabeza de la orden.
SATANAS.