ONIROMANCIA

« Older   Newer »
  Share  
astaroth1
view post Posted on 18/1/2016, 04:51 by: astaroth1




so%C3%B1ar%2Bcon%2Bla%2Bmuerte%2B04
Cumplimiento de un deseo o autorretrato

Del mismo modo que rechazara un modelo de inconsciente fundamentado exclusivamente en la represión del deseo, tampoco el acontecer onírico sería fruto de un cumplimiento deformado de un deseo. Así como la tendencia reguladora de la psique no podía basarse en el principio de placer y la desgana, tampoco podía constituirse en exclusividad el deseo sexual como motor del sueño. Existía una base teleológica en lo inconsciente no condicionada por la pulsión, toda tendencia a la autoconsumación de la psique incluía además de la satisfacción libidinal la consecución de fines espirituales o intelectuales. Para Jung existía una diversidad pulsional no ceñida al carácter sexual, pulsión indiferenciada que iba siempre acompañada de imágenes y motivos arquetípicos.

La idea de que los sueños son el cumplimiento de deseos reprimidos está superada desde hace mucho tiempo. Sin duda, algunos sueños exponen deseos o miedos cumplidos, pero hay muchos tipos más de sueños. Los sueños pueden ser verdades implacables, sentencias filosóficas, ilusiones, fantasías desenfrenadas, recuerdos, planes, anticipaciones, visiones telepáticas, experiencias irracionales y Dios sabe cuántas cosas más.

Para Jung el sueño no era patrimonio exclusivo de lo despreciable e inferior. Lo inconsciente expresaba a su vez novedosas formaciones creativas así como tendencias de desarrollo positivo. En el sueño podían manifestarse tendencias morales y nuevas posibilidades intelectuales.

Ya en 1913 propondría Jung frente a la concepción biologicista del cumplimiento de deseo de Freud una concepción de los sueños de base puramente psicológica: el autorretrato. El sueño es una autorrepresentación espontánea de la situación actual de lo inconsciente expresada simbólicamente.

Sin embargo, a esta primera tentativa de comprensión del sueño le llegaría al año siguiente aquella que relegaría a todas las demás: la función compensatoria de los sueños.

Sueños y sueño

Jung concordaba con Freud en conceder a los sueños una posición de excepción sobre la base de las condiciones del sueño, fundamentada en los distintos grados de abaissement du niveau mental. Sin embargo, esta reducción del nivel de conciencia del yo unida al sueño y al dormir no equivalía para Jung a una reducción de la actividad psíquica. Al contrario, tal y como había comprobado anteriormente, la actividad de los complejos no se suprimía, admitiendo por tanto un aumento de intensidad de la vida interior durante el sueño, llegando incluso a interrumpirlo.

De este modo se constataba que además de la consideración freudiana de que en los sueños se contenían emociones penosas, el soñar también iba acompañado de emociones intensas incitando el despertar. Aun cuando Jung aceptara cierta función biológica en tales fenómenos, en el sentido de que la función esencial de los sueños es mantenernos dormidos y que la inducción al despertar hablara del carácter perturbador del sueño o de su aspecto perjudicial para la vida, le resultó mucho más interesante una función psicológica.

De este modo comprobó que la represión emocional en los sueños no cumplía la finalidad biológica de la preservación del sueño, pudiendo incluso eliminar efectos negativos e inhibidores del desarrollo sobre la psique. Pero también se producía todo lo contrario. El incremento de la intensidad de las emociones en los sueños representaba también una fuente de valores impulsores de la vida. En definitiva, se convencía gradualmente de que uno de los valores fundamentales del fenómeno onírico residía en inducir a una orientación consciente, una invitación a reflexionar y a enfrentarse con los contenidos inconscientes.

Por esa razón he llegado a pensar que la concepción de Freud que considera como función esencial de los sueños cumplir los deseos y mantenernos dormidos es demasiado estrecha, aun cuando la idea fundamental de una función biológica compensadora es sin duda cierta. Esta función compensadora tiene que ver, solo en una medida limitada, con estar dormido; mucha más importancia tiene con respecto a la vida consciente. Los sueños se comportan de manera compensatoria en relación con la respectiva situación consciente. Si es posible, nos mantienen dormidos, cosa que hacen forzosa y automáticamente bajo la influencia de nuestro estado durmiente; pero también interrumpen dicho estado cuando su función lo exige, es decir, cuando los contenidos compensatorios son tan intensos como para interrumpirlo. Un contenido compensatorio es especialmente intenso cuando tiene una importancia vital para la orientación consciente.
 
Top
11 replies since 1/6/2008, 01:32   3302 views
  Share